Verano09 JUST

VERANO 2009

Unos meses de desconexión pueden equivaler a años estando el mar cerca.

No digo que no haya echado de menos la electrovida, pero han sido pocos momentos, como una corta y repentina serie de fallos técnicos en una siempre limpia pista de aterrizaje. 

Porque ir no he ido a ningún sitio nuevo, más bien he vuelto a llegar, he vuelto a aterrizar en ese sitio que me espera desde hace treinta años. 

Yo nunca voy realmente a ningún sitio, yo me paso la vida aterrizando, reinventando lo que creía conocer al pelo y al contrapelo. 

He vuelto a estar con todo lo que ya estuve y aun así me he agenciado más de una experiencia, ésas que nunca cuento. Hablo de lo que pueda aportarte ALGO.

A los que nos gusta escribir parece que lo cascamos, ay si de verdad lo fuera... 

Algunos sólo contamos lo que pueda llegar a ti sin encontrarme en todos lados, o al menos sin que te moleste del todo encontrarme, la posibilidad de que te compense un ego, mucho más digerible gracias al verano... Sol, mar, noches, amaneceres, deseos, baños de apasionamiento, desengaños, fascinación, música, libros, cine, magia, decepción, ternura, vanidad, humedad del sur, sequedad del norte.

Cada verano la historia se repite en una versión mejor remasterizada, hasta el punto de considerar el resto de meses una dulce espera de lo deseable: llevar la menos ropa posible y dejarte hacer por sol y agua.

Somos muchos que si no fuera por el poder del mar nos haríamos cada vez más pequeños hasta desintegrarnos.

He disfrutado tres meses en el cabo sin necesitar derroche. En primer lugar gracias a la generosidad familiar de quienes heredamos, fruto del duro trabajo en EL COQUE (puedes saber más de ellos y otros primeros pobladores en el libro "Cabo de Palos en el recuerdo"); en segundo lugar porque todo lo que prefiero cuesta poco o es gratis: leer por un pavo "Introducción a la estética" de Hegel, extasiarse bajo el artístico protagonismo de las nubes de septiembre, rendirse a octubre con los últimos bañistas, escribir sobre lo sencillo e increíble, una cerveza con tu amigo del alma, dos con quienes te gustaría que lo fueran, patearte la playa olvidándote hasta del nombre de tu perro. 

Vaciarte de lo oficialmente importante y sospechar que jugar con tu vida a lo que te dé la gana es otra posibilidad que solo los acabados juzgan.

Por mucha tormenta que reaparezca, por mucha crisis que permanezca, desde ya comienza mi countdown para aterrizar en el próximo verano. 

Imaginar es gratis y no hay nada que dé más rentabilidad.

(FOTOS: Levante/Con mis primas/con Kuko/Acantilados/Con Maddy y Camiseta Woody Allen/ Canto Gordo/ Exposición del pequeño Ricardo en la fachada de casa/ Fotografío sus pasos/ Zeneta/ Procesión Virgen del Carmen/ Mi hermano Samuel, Lunares y Fede Aniorte.